HIMACS: Eficiencia y diseño en las celosías de una vivienda en Francia al más puro estilo años 50

Desde los proyectos más sencillos hasta los más atrevidos, HIMACS acompaña desde hace años a arquitectos, diseñadores, carpinteros, ebanistas, instaladores de paneles, etc., y así continúa en contacto hasta día de hoy con aquellos para los que la pasión creativa forma parte de su ADN. La búsqueda de una obra perfecta fomenta la creatividad y el atreverse con cosas nuevas que, más allá de los proyectos, constituyen una magnífica aventura humana de la que somos testigos privilegiados.

Entre estos afortunados creadores se encuentra KAZÉHANA & TUILLIÈRE, un taller que presenta uno de sus últimos trabajos con el sorprendente revestimiento de esta villa contemporánea, firmada por el arquitecto Thomas Danin, y situada en una cala de Vaux-sur-Mer, en Royan, Francia.

SOLUNA: una fusión entre parasol y fachada

Al más puro estilo de los icónicos parasoles que marcaron la arquitectura de la ciudad de Royan en los años 50, tres elegantes celosías de gran formato, elaboradas en HIMACS, recubren y realzan la fachada de la vivienda como si de una segunda piel se tratara. Distribuidas en 10 metros de zona corredera, su diseño juega con motivos del sol y la luna, lo que proporciona unos sorprendentes efectos de sombras al interior de la villa.

Situada frente al océano Atlántico, las condiciones de diseño eran muy exigentes, motivo por el cual KAZÉHANA & TUILLIÈRE eligieron los mejores materiales, como HIMACS, para hacer realidad estas celosías contemporáneas de tan alta gama. El blanco inmaculado de HIMACS Alpine White proporciona al interior de la vivienda una luminosidad delicada y refinada. Además, los motivos calados presentes en cada celosía, con forma de sol y luna, crean unos sutiles reflejos que se proyectan en el interior de la villa. Este juego de luces y sombras crean a lo largo del día un diseño serpeante que combina perfectamente con el interiorismo de la villa.

«El material presenta una luminosidad excepcional. Un blanco puro, mate y compuesto por minerales naturales, que ofrece una sensación táctil sedosa y sumamente duradera. La luz que genera es muy elegante, incluso relajante, como nos cuentan a menudo nuestros clientes. ¡Para creaciones a medida llenas de delicadeza, necesitábamos un material del nivel de HIMACS!», ha reconocido Julien Tuillière.

Además del confort térmico, la privacidad y el alto nivel estético que las celosías aportan a las fachadas, también proporcionan una personalidad propia a los espacios o casas donde se colocan, haciéndolos resaltar del resto.

El diseño para las celosías de este proyecto se ha realizado basándose en una temática impuesta por el cliente, con elementos como la luna y el sol, y a partir del boceto de la diseñadora Harumi Kazéhana. Así nació SOLUNA: un modelo decorado con soles y lunas, todo sobriedad y curvas.

Desde el esbozo hasta su materialización, se han seguido muchos pasos llenos de esmero, pasión y precisión, combinando procesos digitales y artesanía artística. La instalación de SOLUNA consta de tres celosías de 360 cm de altura x 85 cm de anchura, de una sola pieza y con resultado extremadamente depurado, y una carpintería metálica a medida, que ha permitido integrar el material HIMACS en un mismo plano. El componente que oculta los raíles está realizado también en HIMACS. Todo el conjunto y accesorios se han llevado a cabo de forma personalizada.

«Más que una fuente de inspiración, se ha establecido una auténtica fusión entre nuestro proceso de creación y el material HIMACS. Somos amantes de la luz y de los acabados sin concesiones, y este material permite expresarnos libremente al trabajar con él de forma poco convencional. Lo que es muy estimulante para nosotros es que HIMACS consigue reflejar a la perfección toda la sensibilidad y la emoción que ponemos en nuestro trabajo», señalan desde KAZÉHANA & TUILLIÈRE.